En ComunicaciónPopular.com.ar se encuentra un interesante artículo titulado ¿Puede Clarín “asesinar” a Pino Solanas? sobre la posibilidad de los políticos en salir en televisión y cómo mediante su "desaparición" se logra dejarlos relegados a aquellos que son incómodos al poder, o sea, al poder capitalista.

Más allá de las mentiras y ficciones que se enseñan en la escuela capitalista o en la adoctrinación de los medios masivos de comunicación de que «la democracia es un sistema de gobierno y una forma de vida (¡!) y que su elemento fundamental es la participación del pueblo en la formación, conducción y control (¡¡¡!!!) de los órganos de gobierno»; existe un realidad: los políticos en campañas electorales necesitan mucho dinero que sólo pueden obtener de la burguesía, también necesitan exposición en los medios como la TV o los diarios que sólo están en control de la burguesía. Encima (en el mejor de los casos), el pueblo tiene absolutamente vedada su participación del Poder Judicial y no se le pregunta sobre la situación de las cárceles, fuerzas armadas y servicios de inteligencia y mucho menos podrá vigilarlos, controlarlos o sentirse protegido de estos monstruos que existen gracias a sus impuestos.

La "democracia" capitalista está sobrevalorada por las atrocidades de las dictaduras abiertas que el capitalismo creó en distintos momentos y lugares para frenar la lucha del movimiento obrero y del movimiento comunista internacional. Sin embargo, la democracia es sólo una forma de gobierno (no "una forma de vida" como dice la propaganda, al menos en Argentina, del Estado) y lo realmente importante es que el Estado es un instrumento al servicio de la clase dominante de todas las épocas (en la nuestra la burguesía), independientemente de su forma estatal o gubernamental.


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